Más de 80 participantes se han dado cita -presencial y virtualmente- en la ponencia y clase magistral de la directora del proyecto de excavación en el templo de Tutmosis III en el que ha desarrollado los ajuares encontrados en el yacimiento del templo a lo largo de las 13 campañas realizadas en un nuevo Curso de verano de la UNED.
La sede de la UNED ha acogido el curso «Arte egipcio para el Más Allá: Ajuares funerarios. Del oro de los reyes a los sencillos amuletos» celebrado entre el 7 y 9 de julio de 2021 en Ávila y en el que ha participado Myriam Seco con la ponencia «Ajuares encontrados en el yacimiento del templo de Tutmosis III en Luxor».

Comenzó la intervención ofreciendo una fotografía del yacimiento del templo de Millones de Años de Tutmosis III, desarrollando una descripción para situarlo a los participantes “nos encontramos trabajando al oeste de Luxor. El espacio contiene una gran riqueza arqueológica, pues alberga numerosos enterramientos, tanto debajo como alrededor del mismo. Estas tumbas, unas anteriores y otras posteriores a la construcción del monumento y pertenecientes a distintas épocas de la historia de Egipto, han aportado interesantes estructuras arquitectónicas y variados objetos funerarios elaborados en distintos materiales. A lo largo del tiempo, los trabajos se han centrado en un promontorio con enterramientos de gente humilde de finales del Primer Período Intermedio y comienzos del Reino Medio; tumbas nobiliarias de finales de la dinastía XII y comienzos de la XIII; una tumba que albergaba restos de un sarcófago de madera y un bello cartonaje de la dinastía XXII, y una serie de tumbas de las dinastías XXV y XXVI”, detalló la doctora Seco.

A lo largo de su exposición hizo un amplio detalle de los hallazgos “en el mencionado promontorio, situado al exterior del muro perimetral norte, encontramos 32 enterramientos excavados hasta el momento, algunos de ellos intactos, y un número indeterminado por excavar. Estas tumbas simples, que pertenecieron a la clase trabajadora y más humilde, han aportado relevantes ajuares funerarios con diversos tipos de objetos, como por ejemplo recipientes cerámicos, collares, un espejo de bronce, reposacabezas de distintas formas y materiales, mesas de ofrendas de arcilla y maquetas funerarias de caliza”, descripción que acompañó de material gráfico mostrado a los participantes, que pudieron visualizar con detalle en las fotografías y vídeos expuestos por la directora del proyecto arqueológico.

La conferencia permitió que conociéramos nuevos datos de los trabajos, como “el conjunto de veinte tumbas situadas debajo del templo y al exterior del muro perimetral oeste que pertenecieron a la alta sociedad tebana, en ellas destacan ajuares con hermosas joyas de oro, numerosos fragmentos de cuchillos mágicos y manos de marfil de hipopótamo, estatuillas de fertilidad, trozos de madera policromada de ataúd, piezas de maqueta de madera, tapas de vasos canopos de madera que conservan rostros y estelas funerarias cuya configuración es poco habitual” puntualizó Seco.

Otro de los momentos más interesantes de su intervención fue cuando habló del cartonaje, “hallado en una pequeña tumba situada al exterior del muro perimetral sur, perteneció a un personaje de rango intermedio llamado Amón-Renef” precisando que “conservaba muy buena policromía y en él hemos podido observar particularidades religiosas relacionadas con los mitos solares y osiríacos que se utilizaban con el fin de garantizar la regeneración y la protección del difunto en el Más Allá” añadiendo un matiz “al llevar todos los elementos religiosos necesarios pintados en el cartonaje, la momia del difunto carece de amuletos”.

Es amplio el recorrido por el yacimiento, así Myriam Seco continuó con la esquina noroeste donde “han sido localizadas hasta el momento cinco tumbas construidas en una fase que comprende el final del Tercer Período Intermedio y la Época Baja. Todas fueron saqueadas y algunas presentan destructivas evidencias de inundación. Especialmente interesantes fueron la número 22, con un depósito de momias que habían sido profanadas, y la número 26, en cuyo interior fueron hallados numerosos restos de ajuares y ofrendas que pueden aportar datos sobre las necrópolis tebanas de épocas tardías” precisó.
A través de este recorrido por las tumbas de diferentes necrópolis y épocas del yacimiento especificó que “podemos aportar una representativa muestra de la riqueza de los ajuares funerarios tebanos a lo largo de buena parte de su historia”.
Entre los participantes han estado varios miembros de la “Asociación de Amigos de Tutmosis III” -que preside José Luis Carbonell– como el secretario, Ramón de Salas que asistió junto a Paloma y Maribel de Salas además de estudiantes, historiadores y profesionales del mundo de la arqueología y la egiptología.

El curso dirigido por Inmaculada Vivas Sainz y coordinado por Antonio Pérez Largacha ha mostrado las investigaciones más recientes e inéditas de la dimensión funeraria del antiguo Egipto, estudios destacados y numerosos teniendo en cuenta la importancia que el pueblo egipcio daba a la vida en el Más Allá, huyendo de los aspectos puramente esotéricos que suelen rodear al mundo egipcio.
